viernes, 26 de noviembre de 2010

Banderas y Palma

Los enigmas empiezan a resolverse. Desde el pasado verano que conocimos la noticia oficial, tenemos pregonero ahora desde hace unos días también tenemos cartelista.

Con el pregonero deseado y el pintor esperado por muchos cofrades malagueños, nos disponemos a otear entre las páginas de un calendario que ya se duerme y de uno que empieza a bostezar la semana grande cuando cada vez son menos las jornadas que faltan para que fragancias de azahares y murmullo de campanillas secuestren a la eterna ciudad para mostrarle la Pasión, Muerte y Resurrección del Hijo de Dios según Málaga, según sus calles, sus gentes y sus costumbres.

Palma asegura que cuando conoció la noticia por parte del propio presidente de la Agrupación, estuvo varios días sin poder conciliar el sueño. Trás la sorpresa y después de haber trascendido al público, es su momento y se sumerge en el tápiz donde poder explosionar los colores para representarnos un momento, una imagen o quizás algún Titular que no conoceremos hasta pasada la próxima navidad. Mientras, Banderas inmerso en su devenir habitual entre viaje y viaje, entre rodaje y rodaje seguro que tendrá algún instante para ir esbozando algunas líneas de su esperada intervención. ¿Quien sabe si ya lo tiene escrito y Palma finalizada su obra?

Con esto, empieza a concretarse el gran acto que es nuestra Semana Santa,comienzan a repartirse los papeles, infinidad de carteles, pregones, presentaciones y estrenos empiezan a tomar forma,y a todo esto se une el sueño, el eterno sueño de los cofrades el que nunca despierta en todo el año, me atrevería a decir que  más de uno llevamos soñando desde que se fue el palio de la señora Reina de los Cielos por el dintel de San Julián, esperando la salida por calle Parras en la mañana siempre esperada del Domingo de Palmas del Señor de la Pollinica.

Ahora empiezan a acercarse los días, no obstante siguen faltándonos muchos pero como decía ya somos más de uno los que levantamos las hojas de este agotado calendario para acercar nuestra celebración más ancestral.

Banderas y Palma pondrán la palabra y la imagen respectivamente, miles y miles de malagueños anónimos pondremos el sentimiento, el fervor y la pasión.

Vayan dedicadas estas líneas a todos los que hacemos que Jesucristo, padezca, muera y resucite en nuestra bendita tierra cada primavera.






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