Los cofrades ya hemos bautizado
al domingo que precede al de Ramos como el domingo de traslados, y es que es el
que más procesiones reúne en sus calles. Las cofradías aprovechan la jornada
para trasladar a sus Sagrados Titulares a los tronos procesionales a las
respectivas casas hermandad.
La Sangre abría la mañana desde
San Felipe Neri, más tarde Gitanos partía desde los Mártires para llegar hasta
calle Frailes donde tiene su casa hermandad. Prendimiento hacía lo mismo desde
Capuchinos. Pollinica procesionaba hasta calle Parras para desde allí ser la
primera en iniciar nuestras procesiones.
El Rocío recorría su barrio
victoriano antes de llegar a su sede, y el Huerto partía de los Mártires camino
de su casa hermandad al otro lado del puente del Guadalmedina, cruzando el de
los Alemanes. Piedad, Viñeros completaron la tarde de procesiones por nuestras
calles.
De forma claustral lo hicieron
Penas y Esperanza que salió unos metros a la calle para entrar en el salón de
tronos. Fue una jornada intensa y con numeroso público en nuestras calles.
Ganas de Semana Santa se respira.
Foto:Laura Pérez
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