Están a punto de cumplirse cien
años del nacimiento en San Roque (Cádiz), del paradigmático artista Luis Ortega
Bru (1916-1982). Con dicho motivo, la Archicofradía Sacramental de Pasión y
ArsMálaga–Palacio Episcopal preparan una exposición y un ciclo de conferencias
que se desarrollarán desde principios de diciembre de 2016 y por espacio de dos
meses, hasta enero de 2017.
Un comité técnico integrado por
el hijo del artista, amigos de éste y profesores de las Universidades de Málaga
y Sevilla –coordinado por el doctor en Historia del Arte, Javier González–, ha
diseñado un completo proyecto museográfico que tiene por objetivo básico poner
en valor las singularidades estéticas de Ortega Bru. Se trata de la primera
muestra monográfica dedicada a este creador, además de una de las más completas
de las escasas realizadas hasta fecha, reuniendo por vez primera una selección
de las creaciones claves de este escultor y pintor. El discurso expositivo,
siguiendo un criterio estético-biográfico, tratará de contrastar la obra
procesional con otras piezas, profanas y religiosas, en las que puede
observarse el conocimiento que el artista tuvo de las Vanguardias históricas y
la adecuación, instrumentalización y proyección de las mismas sobre el lenguaje
tradicional.
De hecho, Ortega Bru es el
artista más sincero y comprometido de la escultura procesional contemporánea
del siglo XX. Su habilidad para conciliar la perfección de la talla en madera
con un sentido dramático, es el resultado de un doble proceso: el de la
relectura de fórmulas manieristas y la relación de éstas con sus propias
vivencias y dramas personales. De igual manera, la historiografía ha puesto en
luz recientemente que no solo el artista interpretó la tradición escultórica y
pictórica sino que, además, se mostró receptivo a las aportaciones de los
movimientos vanguardista, en especial al Futurismo, Expresionismo, Surrealismo
y Cubismo. La combinación de estas tendencias
otorga al sanroqueño
la categoría de “artista moderno”, reivindicando además la validez de la
escultura religiosa policromada como vía para el experimentalismo y la
reflexión artística.
De entre las
esculturas, pinturas y dibujos que podrán verse en la exposición, destaca la
propia imagen de Jesús de la Pasión, resumen plástico de la labor artística de
Ortega Bru y referente icónico-devocional de la propia Archicofradía. El Señor
quedará dispuesto dentro del discurso expositivo de tal forma que, respetándose
su valor devocional, puedan advertirse los recursos estéticos y formales
aplicados por su creador. De igual manera, están comprometidas las cesiones de
otras piezas procedentes del patrimonio familiar del artista, conservadas en la
actualidad por sus hijos Ángel Luis, Carmen y Débora. El Museo Ortega Bru,
establecido en la localidad natal del escultor y pintor, colaborará también
cediendo para la ocasión siete obras de su colección permanente. A este núcleo
central se les sumarán otras aportaciones procedentes de coleccionistas
privados, hermandades y órdenes religiosas.
A la par de la
exposición, se ha diseñado un encuentro científico en el que, desde distintas
disciplinas, se reivindique la fortuna crítica de Ortega Bru como uno de los
autores más relevantes del arte español, afirmación que es producto de las
investigaciones que se han desarrollado en los últimos años.
Con esta iniciativa
cultural, la Archicofradía de Pasión y ArsMálaga se suman a las celebraciones
que durante 2016 están llevando a cabo diferentes entidades andaluzas, en pro
de rendir un homenaje sincero a un artista de trascendencia local, regional y
nacional, prácticamente desconocido -cuando no infravalorado- por la opinión
pública en general o catalogado únicamente por su aportación a la estatuaria
procesional.
Pasado el verano se
realizará la presentación detallada y pública del evento.
Fuente y fotos:Archicofradía de Pasión
No hay comentarios:
Publicar un comentario